Los interminables recursos de internet ofrecen a los jóvenes mucha información sobre sexo, pero ello no se traduce necesariamente en una buena educación sexual. Todavía siguen apareciendo risitas ante determinadas palabras, sus preocupaciones en general siguen siendo muy básicas y hay temáticas como la pérdida de la virginidad o los métodos de prevención que siguen suscitando muchas dudas